Wallbox nació en 2015, fundada por Enric Asunción y Eduard Castañeda, dos ingenieros con un punto de vista visionario sobre el sector de la electromovilidad: eliminar las barreras de adopción del coche eléctrico produciendo soluciones de carga inteligentes, de diseño y asequibles. Pero no solo eso: su gran objetivo va más allá y se centra en transformar a Wallbox en el gestor del centro de energía de la casa. Así, el cargador convierte el vehículo eléctrico en la pieza fundamental para cambiar el paradigma energético y darle el poder al consumidor a la vez que se facilita el consumo de energía renovable.
Asunción y Castañeda se centraron inicialmente en el desarrollo y fabricación de cargadores domésticos, ya que habían identificado que la atención de las empresas del sector estaba puesta en el desarrollo de productos de carga pública, pero que nadie estaba pensando en llevar a cabo soluciones inteligentes para los hogares, adaptados a las necesidades de cada vivienda.
Hasta la fecha, la empresa ha desarrollado, producido y lanzado cinco productos. Arrancó su andadura con Pulsar Plus, su cargador inteligente y compacto desarrollado para el uso en el hogar, y Commander, cargador interactivo con pantalla táctil ideal para espacios compartidos y pensados para la carga de vehículos eléctricos para empresas. En 2017, Wallbox anunció el lanzamiento de Copper SB, creado para empresas que desean electrificar su aparcamiento comercial.
Pese la pandemia, la empresa mantuvo el pie en el acelerador y, en septiembre de 2020, lanzó al mercado Quasar, el primer cargador doméstico con tecnología bidireccional del mundo, que se diseñó para transformar los vehículos eléctricos en fuentes de energía de gran potencia, permitiendo cargar y descargar el vehículo eléctrico para alimentar el hogar o la red de suministro con la batería del vehículo. Gracias a esa innovación, Wallbox conquistó diversos premios a nivel internacional, como el Best of CES, el mayor reconocimiento otorgado por una de las ferias más importantes de tecnología a nivel mundial.
En noviembre de 2020, Wallbox presentó Supernova, producto que marcó la irrupción de la empresa en el segmento de carga pública, complementando su oferta existente para carga residencial y semipública con una solución de carga rápida y, 10 meses más tarde, presentó el cargador hiperrápido Hypernova, capaz de añadir 160km de autonomía en sólo 5 minutos.
Wallbox se encarga de toda la cadena de producción de estos productos: desde el diseño inicial hasta su producción. Para ello, tiene 4 fábricas en todo el mundo: 2 en Barcelona (una en Sant Andreu de la Barca y otra inaugurada este 2022 en la Zona Franca), 1 en China y la cuarta inaugurada a finales de octubre de 2022 en Estados Unidos.
En octubre de 2021, Wallbox debutó en la bolsa de Nueva York bajo la etiqueta WBX, convirtiéndose en el primer unicornio – como se conoce a las empresas con una valoración privada de más de 1.000 millones de dólares – que cotiza en la bolsa neoyorquina.
Unos meses antes, la compañía había aterrizado en el mercado norteamericano, donde su cargador doméstico, el Pulsar Plus tuvo muy buena acogida. Esto se ha traducido en la firma de acuerdos de colaboración con grandes empresas como Uber (acuerdo que al principio era solo para la bahía de California y que, en pocos meses, se extendió a todo EE.UU. y Canadá), Polaris, CES, Nissan, Fisker… En febrero de 2022, además, se convirtió en una de las pocas empresas españolas que se han anunciado en la Super Bowl.
Actualmente, la compañía es uno de los proveedores líder de soluciones de carga de vehículos eléctricos (VE) y de gestión de la energía en todo el mundo y sigue avanzando a grandes pasos, con presencia en más de 110 países y oficinas en Europa, Asia y las Américas.