Barcelona es una ciudad líder en muchos ámbitos que ha sido capaz de generar un entorno de confianza que se traduce en el crecimiento de diversos sectores estratégicos para la economía de la ciudad y su tejido empresarial. Actualmente la capital catalana, que es también la capital europea del Mediterráneo y la principal metrópolis del sur de Europa, es reconocida internacionalmente por su oferta cultural y artística, por el acceso al conocimiento y la investigación, por su creatividad e innovación, por su apuesta en sectores de alto valor añadido y por la calidad de vida que acompaña a las personas que viven y trabajan en este territorio.

Todos estos activos posicionan la Marca Barcelona muy favorablemente en los principales rankings mundiales que la sitúan como la cuarta en celebración de congresos, la quinta capital de la moda o la tercera ciudad europea, después de Londres y Dublín, en captación de inversión extranjera directa, una actividad que en los últimos dos años ha generado 20.000 puestos de trabajo en Barcelona.

El excelente reconocimiento internacional de una capital en constante transformación se suma a los importantes activos logísticos de que disfruta Barcelona y su área metropolitana, un territorio que acoge 3’2 millones de habitantes y que genera el 52% del PIB catalán. Entre el Puerto y el Aeropuerto, el Consorcio de la Zona Franca o Mercabarna hay un espacio económico que ofrece unas oportunidades extraordinarias para la generación de puestos de trabajo y actividades que dan valor a su tejido empresarial. En cuanto a Mercabarna, se trata de un clúster agroalimentario que engloba 700 empresas del sector y 23.000 trabajadores y que con iniciativas como el Hub Alimentario del Mediterráneo y el Clúster Mercabarna Export nos consolidan como el gran centro agroalimentario del sur de Europa y del Mediterráneo.

Desde el Ayuntamiento de Barcelona estamos trabajando de manera conjunta con el resto de instituciones implicadas en la elaboración de un plan director de todo este ámbito con el fin de promover su competitividad como motor económico, aprovechando la oportunidad que representa para el sector logístico el Corredor Mediterráneo.

La importancia del sector logístico en Cataluña se pone de relieve con las más de 30.000 empresas que facturan anualmente más de 15.000 millones de euros y generan 144.000 puestos de trabajo.

Por este motivo, y ante la creciente complejidad del mercado actual desde las administraciones públicas tenemos el reto de impulsar aquellos aspectos que inciden directamente en la mejora de la eficiencia y la optimización de costes en las redes logísticas.

En este sentido, Barcelona cuenta con varios agentes para dinamizar y fortalecer este sector, como es el caso de la plataforma Barcelona Centre Logístic (BCL), con la que el Ayuntamiento participa activamente, junto con otras entidades públicas y privadas.

Debemos seguir consolidando esta hoja de ruta y estas fortalezas que nos convierten en una ciudad puntera con una solvencia financiera capaz de atraer talento e inversión internacional. Una ciudad donde la actividad logística ocupa un lugar fundamental, no sólo en cuanto a las infraestructuras de primer orden que nos conectan a los principales mercados de Europa, Asia y América Latina, sino porque contempla, en su futuro cercano, una importante inversión para reforzar estas conexiones internas y externas.

De la misma manera que Barcelona lideró la revolución industrial del siglo XVII, ahora queremos liderar la nueva revolución tecnológica e industrial del siglo XXI. Somos la Capital Mundial del Móvil, la Capital Europea de la Innovación y, en definitiva, somos una gran capital que quiere ampliar su influencia en el mundo y que lleva la L de logística escrita en su nombre.

Sònia Recasens

Teniente de Alcalde de Economía, Empresa y Empleo del Ayuntamiento de Barcelona