Los cruceristas de puerto base -aquellos que empiezan y terminan su itinerario en la ciudad- ya son el 61% de todos los pasajeros de cruceros que llegan a la capital catalana; en el último año este tipo de cruceristas han pasado del 55% al 61% del total, dato que demuestra que está dando frutos la estrategia de creación de un modelo sostenible que se impulsa desde el Puerto.

Dos ejemplos significativos de la apuesta de los grandes operadores de cruceros por Barcelona como puerto base son los de Carnival y Royal Caribbean. Por un lado, Carnival está a punto de comenzar las obras de construcción de una nueva terminal de cruceros en el muelle Adosado del puerto catalán, que con 10.000 metros cuadrados será la más grande de Europa. Por otra parte, Royal Caribbean forma parte del accionariado de Creuers del Port de Barcelona, sociedad que gestiona las terminales públicas del enclave.