El Port de Barcelona ha cerrado el primer trimestre del año con tráfico total de 16,5 millones de toneladas de mercancías, lo que supone un incremento del 18,5% respecto al mismo periodo de 2017.
Así, hasta el mes de marzo la instalación catalana ha encaminado más de 786.000 TEUs, un 18% más que el año pasado. Aunque los contenedores de transbordo siguen registrando el mayor impulso (+45%), la carga contenerizada de comercio exterior también mantiene un destacado dinamismo. De hecho, los contenedores de exportación han crecido un 9,6%, hasta alcanzar los 190.488 TEU, mientras que los de importación lo han hecho a un ritmo del 7%, con 135.724 TEU descargados en las terminales del puerto.
Durante los tres primeros meses del año el Puerto ha registrado más de 4 millones de toneladas de líquidos a granel, con un incremento del 16%. El gas natural (+26%) y la gasolina (+19%) son dos de los productos que más han contribuido a estos resultados.
Por otra parte, las terminales especializadas en la recepción y distribución de sólidos a granel han encaminado 1,1 millones de toneladas de mercancías hasta el mes de marzo, con un incremento del 31%. En este caso, este excelente registro se atribuye principalmente al buen comportamiento del cemento y clinker (+105%), especialmente en cuanto a las exportaciones, y al crecimiento experimentado por los cereales y las harinas (+55,2%).
El tráfico de vehículos, que el año pasado tuvo un descenso por los menores volúmenes de producción y exportación registrados en las plantas de automoción de España, se recupera durante el primer trimestre de 2018. Con un total de 217.187 automóviles transportados, el Port de Barcelona crece un 6,2%, sobre todo debido al avance de las importaciones (+16%), pero también por el signo positivo de las exportaciones (+5%).
La carga rodada (mercancías que son embarcadas en camiones, plataformas o remolques) ha alcanzado las 95.800 unidades de transporte intermodal (UTI) hasta el mes de marzo, con un incremento del 6%. El impulso más destacado ha sido el experimentado por las autopistas del mar que conectan Barcelona con Italia y el Norte de África. Estos servicios han transportado más de 39.000 UTI durante el período, con un incremento del 11,5% respecto al año pasado.