El Departamento de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica ha puesto hoy en valor en Bruselas las acciones que está llevando a cabo para optimizar y dar capilaridad al Corredor Mediterráneo mediante los servicios ferroviarios y de transporte interurbano por carretera de su competencia en todas partes del territorio de Cataluña. El secretario de Movilidad e Infraestructuras, Manel Nadal i Farreras, ha participado hoy en la reunión del Foro europeo del Corredor Mediterráneo, órgano consultivo, presidido por el Coordinador del Corredor, en el que participan las representaciones de los estados miembros interesados ​​y las regiones y autoridades portuarias.

El nuevo Reglamento de la UE para el desarrollo de la red transeuropea de transporte “ha reforzado dos temas en los que la responsabilidad de nuestro Gobierno es muy significativa: los nodos urbanos de la red de transporte y la promoción y el impulso de las terminales intermodales para el transporte de mercancías”, ha puesto de relieve el secretario. En cuanto al transporte de viajeros, al Gobierno de Cataluña “nos preocupa garantizar una buena relación, útil y efectiva, entre los servicios ferroviarios y de transporte interurbano y los de larga distancia, alta velocidad, carreteras, aeropuertos, donde Barcelona destaca como eje internacional, y puertos de interés general”.

Como ejemplo, el secretario Nadal ha citado la estación intermodal de la Sagrera en Barcelona, ​​en la que también participa la Generalitat, que es “una buena demostración de cómo aplicar buenas prácticas en torno a la dotación de infraestructuras, su funcionalidad y los servicios relacionados, a fin de ayudar en la optimización del Corredor Mediterráneo”. En este contexto, el secretario ha propuesto la celebración de una reunión del grupo de trabajo sobre nodos urbanos en Barcelona durante el primer semestre de 2025.

En el ámbito del transporte de mercancías por ferrocarril, “el empuje de nuevas terminales supone un punto de inflexión decisivo para facilitar el transporte y mejorar la competitividad de las empresas locales e internacionales que operan en el eje del Corredor”. Así, el Govern está analizando “cómo plantear desde el sector público la oferta de terminales distribuidas en el territorio e interconectadas con las infraestructuras y servicios que conforman el Corredor Mediterráneo como nueva política pública. Una política pública alineada decididamente con los objetivos de la agenda verde de la UE”.